La sala, tu habitación o el cuarto de los niños.
Colocar cojines le dará a tus ambientes personalidad y estilo.
Es importante que no abuses de ellos con la cantidad o la combinación de estampados.
¡Recuerda que MENOS ES MÁS! 😉
Aquí van algunos consejos e ideas que te van a interesar
Puedes utilizar la famosa regla 60/30/10.
Mira a tu alrededor en el espacio donde quieras colocar los cojines y presta atención a los colores que lo componen.
Seguro tienes un color dominante, un color secundario y un acento.
Recomendamos que respetes esa proporción a lo hora de seleccionar los cojines que quieres colocar.
No temas a experimentar con los estampados. Obviamente con mesura y sin que resulte saturado a la vista.
Puedes combinar estampados más cargados (como lo son a veces los floreados) con estampados más relajados y simples como los que ofrecen las líneas.
El toque final será sumarle algún cojín de un color liso, sin estampa y ¡VOILÁ!
Si quieres dotar de elegancia tu sofá, puedes incorporar cojines con estampados más delicados, efectos acuarelados o colores pasteles.
Y combinarlos con otros cojines lisos cuyos colores sean los que están presentes en el cojín estampado.
¡Hora de jugar! varios cojines, todos diferentes, con estampados diferentes, telas y texturas variadas, sólo una regla… respetar una gama de colores.
Recomendamos que utilices el color del sofá (o el sitio donde los quieras colocar) como base para seleccionar la gama de colores a utilizar.
Por último, un clásico con el que no fallarás.
Cojines blancos combinados con tonos beiges o marrones claros.
Con esta fórmula seguro que le atinarás y el espacio que decores se lucirá estupéndamente. Le aportarás un estilo relajado, delicadeza y luminosidad.